El PSOE ha dado por cerrado el periodo de cortesía al nuevo equipo de Gobierno, por lo que reanuda sus contactos con la prensa para mostrar su opinión sobre la gestión municipal con el ánimo de “trabajar por Arcos”. Su secretario General, Isidoro Gambín, anuncia la apertura de su sede en la avenida Miguel Mancheño de lunes a jueves en horario de tarde para atender a la población que desee trasladarle algún asunto o situación. “Estamos con las mismas ganas y fuerzas porque alguien tiene que hacer oposición y fiscalizar al equipo de Gobierno para que no haga lo que le dé la gana”, aseveraba. En primer lugar, el partido ha mostrado su parecer sobre la aprobación del Presupuesto General. Gambín asegura que el ejecutivo ha aprovechado el respeto de los socialistas “para decir barbaridades y mentiras” y que se ha dedicado a “llorar” por la situación económica heredada. “El acalde lo único que ha hecho en dos meses ha sido llorar y llorar, aunque dijo que no lo haría”. Gambín señala que sus contestaciones se dirigen al equipo de Gobierno y no al partido Ai-Pro, del que lamenta que su secretario General siga realizando declaraciones a pesar de estar condenado por la justicia. El secretario esgrime que la aprobación del Presupuesto ha sido precisamente fruto de la gestión del equipo socialista. También justifica la aprobación de un único presupuesto en ocho años durante su mandato con la deuda de cien millones de euros que, según expresa, heredó en 2015; deuda que se ha reducido a 70 millones. En este sentido, el exalcalde defiende que se ha rebajado en un 30 por ciento bajo su mandato, siendo la mayor parte de esa deuda una consecuencia de la gestión de la primera etapa del equipo PP-Ai-Pro. Además, apunta que actualmente el Ayuntamiento no sufre embargos como lo sufrió el anterior ejecutivo debido a una mejor situación económica, y cita como ejemplo, entre otros, la Participación en los Tributos de la Comunidad Autónoma (Patrica), como también señala que ahora no hay deudas con proveedores, con Hacienda y Seguridad Social, expresa el socialista, que recuerda que su primer presupuesto aprobado fue en 2022 con una superávit que permitió sacar adelante las cuentas. La liquidación de ese año habría sido fundamental para la aprobación del nuevo Presupuesto. “No se puede comparar la situación de antes y la de ahora. Nos dejaron en la ruina en 20215 y por eso no pudimos entonces sacar el Presupuesto”. Del mismo modo, Gambín señala que ahora tampoco hay problemas con el pago de la nómina gracias a su gestión durante ocho años. “Nosotros no tuvimos esa suerte”, que diría. Si ellos hubieran heredado la situación que nosotros heredamos sí que habrían llorado y cerrado el Ayuntamiento”. Gambín argumenta su voto en contra al nuevo Presupuesto “con el balance de lo negativo y positivo”, y lamenta que se utilice la piscina cubierta para lanzar críticas contra el PSOE. El secretario socialista considera que el nuevo equipo de Gobierno vivirá de la renta de su predecesor porque dejó listos los proyectos de energías renovables que dejan excelentes expectativas de ingresos, casi dos millones más que sumar al importe total del Presupuesto. Lo negativo, explica Gambín, es que PP-Ai-Pro ha llevado a cabo la reducción de partidas para políticas sociales y violencia de género. “Eso no se puede permitir”, concluía Gambín. Su compañera vicesecretaria General, María José González, ha criticado “la corta” intervención de la delegada de Hacienda para explicar públicamente los términos del nuevo Presupuesto General. Asimismo, asegura que la única diferencia entre el documento aprobado en 2022 y el nuevo es el aumento de los ingresos gracias a los proyectos empresariales en fase de desarrollo. También le reprocha una modificación de crédito para supuestamente aumentar los salarios del equipo de Gobierno y de su alcalde. “¿Cómo le explica eso a los funcionarios?”, terminaba la exdelegada de Hacienda.

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