El Club Deportivo Jédula, con su presidente a la cabeza, Antonio García Lozano, presentaba en la tarde del pasado viernes al que ya es el nuevo entrenador del primer equipo, Javier Alvarado Dávila, y a los dos jugadores que ha fichado el club para conseguir el ascenso la próxima temporada, se trata de los ex jugadores del Arcos CF, Antonio Manuel Oca Cárdenas(“Pichi”) y Juan Diego Gil Carreras.
Alvarado Dávila llega al club jedulense con mucha ilusión y ganas de trabajar.
Nada más aterrizar en Jédula, lo primero que le pidió el club es que trabaje para conseguir el ascenso, que el primer equipo recupere la categoría, a ser posible en la temporada 2023-2024
Alvarado Dávila afronta este reto con la mayor responsabilidad, trabajo y esfuerzo, rodeándose de los mejores y, sobre todo, siguiendo los sabios consejos de su mayor referente, su padre. El nuevo entrenador del CD Jédula viene con los deberes bien hechos y lo tiene todo estudiado hasta el último milímetro, la plantilla, los partidos jugados dentro y fuera de casa, los errores y aciertos que se cometiron, etc….
El nuevo míster asegura que él puso sobre la mesa el nombre de uno de los jugadores fichados, el de Juandi, a quien conoció durante su etapa en el San José Obrero.
«Pichi» reconoce que nada más finalizar la temporada tuvo claro que quería volver a jugar en el equipo de su pueblo, en el CD Jédula. El fichaje de «Pichi» por parte del CD Jédula no se ha producido de la noche a la mañana, hace tiempo que jugador y club mantenían contactos para conseguir que retornara a las filas del conjunto verdi-blanco.
Juandi regresa con la intención de ayudar al Jédula a conseguir el ascenso y recuperar la categoría. Como en el caso de “Pichi”, eran muchos los que le sugerían a Juandi que volviera a jugar en el equipo de su pueblo.
El inicio de los entrenamientos queda a expensas de una reunión con el presidente del club y de ver en acción a nuevos jugadores que quieren probar para conseguir el visto bueno del míster y así quedarse jugando en el CD Jédula.
Javier Alvarado Dávila tiene asumido que no vale con hacer un buen juego o tener una buena predisposición táctica, el club y la afición lo que quieren son goles, a unos y a otros, espera poderles dar muchas alegrías esta temporada y no verse sumido en la triste y famosa «soledad del entrenador».